Ni Patricia Sanz, ni su hermana Marta, fueron capaces de aguantar el buen ritmo con el que comenzaron en el PHC Classic, un torneo en el que fueron de más a menos para terminar muy lejos de la cabeza.
Ni Patricia Sanz, ni su hermana Marta, fueron capaces de aguantar el buen ritmo con el que comenzaron en el PHC Classic, un torneo en el que fueron de más a menos para terminar muy lejos de la cabeza.
Tras ese buen inicio al que nos referiamos en crónicas anteriores con vueltas de 69 y 70, respectivamente, las hermanas comenzaron a incrementar sus números en la segunda ronda para llegar a la tercera, y definitiva, con sus peores cifras: 75 golpes para Patricia y 73 para Marta.
Los de Patricia llegaban tras una vuelta que terminó convirtiendose en un continúo sube y baja en el que anotó cinco bogeys, uno doble en el hoyo 11, y solo cuatro birdies. Marta, por su parte, completaba el domingo con cinco bogeys y cuatro birdies.
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