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La espera mereció la pena para Gonzalo

Aquello que se suele decir de ver la luz al final del túnel ha sido exactamente lo que ha ocurrido esta semana en el Andalucía Valderrama Masters, puesto que el panorama era bastante oscuro antes del torneo, tanto por la lluvia como por las opciones de tarjeta del European Tour para Gonzalo Fernández-Castaño, pero tras mucho pelear estos días, el objetivo se ha cumplido y la luz ha resultado ser un enorme foco.

Aquello que se suele decir de ver la luz al final del túnel ha sido exactamente lo que ha ocurrido esta semana en el Andalucía Valderrama Masters, puesto que el panorama era bastante oscuro antes del torneo, tanto por la lluvia como por las opciones de tarjeta del European Tour para Gonzalo Fernández-Castaño, pero tras mucho pelear estos días, el objetivo se ha cumplido y la luz ha resultado ser un enorme foco.

Ya comentamos estos días, entre suspensión y suspensión, que el madrileño, para asegurarse los derechos de juego la próxima temporada, necesitaba terminar en el top-15 esta semana, algo que tan sólo había ocurrido una vez en los últimos 12 meses. Tras la tormenta de ayer, por la que se suspendió la jornada, Gonzalo marchaba en tercera posición a falta de 10 hoyos, por lo que lo tenía bastante bien para lograr el objetivo, y de hecho hasta se planteaba mirar de reojo a una posible victoria.

La reanudación no le ha sentado del todo bien, pese a que empezaba con dos cómodos pares en hoyos 9 y 10, pero todo se torcía de manera peligrosa en el 11, cuando la bola se iba fuera de límites desde la salida y terminaba el hoyo con un doloroso doble bogey. Mientras que muchos se podrían haber venido abajo y desaprovechar los dos golpes de ventaja que todavía tenía sobre el puesto 15, Gonzalo sacó el carácter y logró un gran birdie en el hoyo 12. A partir de ahí, pudo respirar algo más tranquilo, pese a un nuevo bogey en el 14.

En los últimos tres hoyos, ya parecía que tuviera la tarjeta en el bolsillo, por lo que la intención era de nuevo mirar hacia arriba, ya no hacia la victoria porque parecía bien amarrada por Sergio García, pero sí hacia un posible segundo o tercer puesto que le diera un cheque más importante y la opción de jugar las Final Series de esta temporada en el European Tour.

En el 16 se escapaba por los pelos el birdie, algo que sí lograría en el par 5 mítico del 17 gracias a alcanzar el green de dos. En el 18, por desgracia, llegó el único green a tres putts de toda la última jornada, lo que le costó el bogey y caer hasta la definitiva quinta posición. A pesar de ese último tropiezo, estaba muy feliz de haber cumplido con el gran objetivo tras una larga semana y un complicado año. Estas eran sus declaraciones al finalizar:

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