Pablo Herrería se ha colocado como líder indiscutible tras la disputa de la segunda vuelta del XXVII Campeonato de España de la PGA – Premio Liébana 2017 tras dos vueltas bajo el par del campo (68 y 70) y terminar con -4 en el total de los dos días, y con tres golpes de ventaja sobre sus más inmediatos perseguidores, Carlos Pigem y Fernando Adarraga, que terminaron con sendas tarjetas de 70 golpes y un total de -1. Fueron los tres únicos jugadores que terminaron al par del campo en este exigente campo de Santa Marina, Cantabria.
Pablo Herrería se ha colocado como líder indiscutible tras la disputa de la segunda vuelta del XXVII Campeonato de España de la PGA – Premio Liébana 2017 tras dos vueltas bajo el par del campo (68 y 70) y terminar con -4 en el total de los dos días, y con tres golpes de ventaja sobre sus más inmediatos perseguidores, Carlos Pigem y Fernando Adarraga, que terminaron con sendas tarjetas de 70 golpes y un total de -1. Fueron los tres únicos jugadores que terminaron al par del campo en este exigente campo de Santa Marina, Cantabria.
“El resultado es tan inesperado para mí como para vosotros. Ya dije el primer día que venía aquí de vacacione y es lo que voy a hace ahora mismo. Irme a la playa”, comentaba Herrería, satisfecho tras dos días de haberle ganado la partida al campo. “No creo que el campo sea muy injusto con mi juego, al menos estos dos días, me ha penalizado los golpes que no han sido buenos, pero por otro lado, me ha beneficiado algún bote de la bola que me ha ayudado a seguir con la moral muy alta”, dijo el madrileño, que hace un mes tomó una importante decisión.
“Estaba jugando tan mal que hace tres meses decidí tomarme un respiro y ni siquiera entrenar; pero el mes pasado, fui a jugar y lo hice tan mal que me avergoncé de mí mismo, así que decidí volver a entrenar, más que nada para no hacer el ridículo y parece que me ha ido muy bien. A la vista está. A ver si dura la racha”, comentaba un sonriente Pablo.
No fue lo mismo para uno de los líderes del primer día, Carlos Balmaseda, a quien la lluvia y el mal tiempo afectó bastante a su juego, además de algunas banderas complicadas y la dureza natural del recorrido diseñado por Seve Ballesteros. Balmaseda, con 76 impactos, cayó a la séptima posición. “No queda otra que seguir luchando. Hoy ha sido muy duro pero no queda otra”, comentó Balmaseda.
Destacar que la mejor tarjeta del día fue la de Sergio Gutiérrez, 66 golpes, con un parcial de -5 hoy tras el 77 del primer día, que le ha aupado a la séptima plaza.
En cuanto a la clasificación femenina, Adriana Zwanck mantiene su segundo puesto, mientras que Patricia Sanz es cuarta. Tras ellas, Virginia Espejo, Irene Calvo y Leyre Ortiz, completan la clasificación de las nuestras.
Para el golfista, el silencio no es vacío, sino la música que acompaña cada swing, cada estrategia, cada instante d...
Los seniors y superseniors madrileños siguen su calendario de competiciones y ayer jugaron en Palomarejos 91 jugado...