El jueves se ha presentado como un día especialmente discreto para lo que, seguramente, esperaban tanto Gonzalo Fernández Castaño como Pedro Oriol. Los dos han comenzado su trabajo en el British Masters, y ninguno se ha aproximado a los puestos de privilegio.
El jueves se ha presentado como un día especialmente discreto para lo que, seguramente, esperaban tanto Gonzalo Fernández Castaño como Pedro Oriol. Los dos han comenzado su trabajo en el British Masters, y ninguno se ha aproximado a los puestos de privilegio.
De los dos el que más cerca se ha puesto del líder es Gonzalo. Aunque le separan cinco golpes del trio de ingleses que comandan la clasificación, el madrileño ha sabido agarrarse al campo para no empezar la segunda ronda debiendo golpes al campo. A onzalo le tocaba madrugar y abrir el campo con nada menos que nueve birdies. Uno tras otro, hasta que el birdie del 10 rompía una racha que retomaría en el 11 para llegar al 17, el hoyo donde firmó sú único error. Precisamente el que decidió el resutlado.
Muy diferente fue la ronda de Pedro Oriol. Ya en el primer hoyo (hoy el 10) se barruntaba que no iba a tener las cosas fáciles. Un doble bogey servía de antesala a su único birdie. A partir de ahí, dos bogeys más antes de su hoyo 9, para cerrar la segunda mitad con inco golpes más, para un total de 80.
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