El golfista que se presenta en el primer tee de salida tiene algo más que valor, sabe que ya no hay marcha atrás y que no hay límites para posibles desastres. En ningún otro deporte es tan fácil ver escapar de las manos una victoria casi segura.
Jugando con niebla
No pudo ser, el combinado madrileño no pudo repetir la gesta de la pasada edición y tuvo que ceder el trofeo al equ...
Veintiún jugadores madrileños lucharán por traer el trofeo a Madrid que se juega en el campo del Club de Golf Alcan...