Solo 18 hoyos separan ya a Luna Sobrón de hacer realidad el sueño americano. Una ronda, la última en la escuela de clasificación para entrar a formar parte del grupo de elegidas que juegan la mejor liga femenina del mundo. Una jornada en la que nada es gratis y donde Luna debe seguir demostrando que es capaz de mantener el nivel que ha demostrado a lo largo de las cuatro jornadas que lleva disputadas hasta hoy.
 
                                            Solo 18 hoyos separan ya a Luna Sobrón de hacer realidad el sueño americano. Una ronda, la última en la escuela de clasificación para entrar a formar parte del grupo de elegidas que juegan la mejor liga femenina del mundo. Una jornada en la que nada es gratis y donde Luna debe seguir demostrando que es capaz de mantener el nivel que ha demostrado a lo largo de las cuatro jornadas que lleva disputadas hasta hoy.
En la de hoy, a pesar de que ha dado un pequeño paso atrás en la progresión que llevaba y en la que cada día mejoraba sus números, Luna salvo los muebles presentando una tarjeta de 72 golpes, par del campo, en la que curiosamente comenzó y terminó con sendos bogeys, aunque no fueron los últimos. Por el camino un bogey más servía para igualar en número a los tres birdies logrados.
En cuanto a Marta Sanz, los 74 golpes que rubricaba en la jornada de sábado le dejaban definitivamente, fuera del corte.
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