Parece mentira que una vuelta de 68 golpes no sirva para pasar el corte. Al menos no cuando se arrastra tres golpes de la jornada anterior, un resultado que elevó los números del madrileño hasta los 73 golpes que aparecían en su casillero al inicio del FedEx St. Jude Classic.
Parece mentira que una vuelta de 68 golpes no sirva para pasar el corte. Al menos no cuando se arrastra tres golpes de la jornada anterior, un resultado que elevó los números del madrileño hasta los 73 golpes que aparecían en su casillero al inicio del FedEx St. Jude Classic.
A pesar de que el esfuerzo fue en vano, Gonzalo intentó redimirse del abultado resultado inicial y, de hecho, remontó hasta treinta y seis posiciones en la clasificación gracias a un resultado que forjó a base de cometer pocos errores y firmar cuatro birdies. Lamentablemente, el único borrón en su tarjeta, un doble bogey que llegaba en el hoyo 15, sumaba dos golpes que al madrileño le hubiesen venido de maravilla para asegurar su permanencia.
El golf y la felicidad tienen una relación compleja y fascinante. Aunque a veces pueda ser frustrante, el golf ofre...
Aunque pueda parecer un deporte de verano, muchos aficionados disfrutan del golf durante todo el año, incluso en lo...