La última ronda del Gran Premio Gambito Golf, séptima prueba regular del I Circuito Profesional Meliá Hotels Internacional Premium 2016  no pudo concluir debido a las malas condiciones meteorológicas que afectan a toda España y en concreto a Andalucía, donde no ha dejado de llover en todo día. El juego fue muy lento toda la jornada y aunque los profesionales hicieron todos los esfuerzos posibles por continuar, el tiempo no lo permitió, ya que el campo estaba anegado, los greenes inundados e injugables  y más previsión de agua en las próximas horas.

Y a quien le dio más pena fue al ganador, el madrileño Javier Gallegos, líder las dos primeras rondas con -9 y que hoy ha estrenado su palmarés en el circuito nacional y se convierte en el séptimo ganador. Y es que Javier iba embalado hacia el triunfo con tres birdies y un bogey en los 14 hoyos que pudo jugar.

“No llegaba a Málaga con buen juego, no le estaba pegando bien; por eso me planteé una estrategia. Sabía que no podía hacer muchos birdies así que pensé en jugar a la parte fácil de cada hoyo y tratar de no fallar para darme más oportunidades. Y sin jugar muy bien pos dos primeros días logré posicionarme. La verdad es que me da lástima que el torneo haya acabado antes de tiempo porque me estaba divirtiendo mucho. Estaba sintiendo la presión de Marcos (Pastor) y sin embargo no perdí la concentración”, comentó el ganador al terminar y ya de camino a Madrid. “Lo voy a celebrar comiéndome 600 kilómetros bajo la lluvia, pero cuando llegue a mi casa voy a invitar a mi familia a cenar”.

Javier ganó la Escuela del Alps Tour la temporada pasada pero, al no poder jugar muchos torneos la perdió al final y tampoco logró pasar la PQ2 del Tour europeo hace unas semanas. Su objetivo era ganar aquí y la Escuela del Alps a mediados de diciembre. Primera parte del plan: cumplida.

“La semana pasada tuve una reunión con mi entrenador Ismael del Castillo. Me dio una buena charla y me dijo que me quedaban dos torneos y que tenía que ganar; estaba trabajando bien y sólo tenía que creérmelo. Y la verdad es que hoy, aunque no he terminado, me lo estaba creyendo. Ha sido una sensación increíble. No quería mirar los marcadores para que no se me fuera la cabeza, pero por delante hoy un grito de Marcos Pastor y pensé que ya me había empatado. Pero no quise preguntar seguí a mi juego e hice pares al 13 y 14, era parte del plan de día: no cometer errores. ¡Y lo logré! Es una sensación maravillosa”, comentó emocionado el ganador, que dedica su victoria a su hermano pequeño de 10 años, Pedro. “Le tengo saltando y gritando en casa. Fue el primero en llamarme. Está muy enviciado con el golf, le pega que asusta. Y aunque esta victoria quiero dedicarla a mis familia, amigos, a Isma (Del Castillo) por creer en mí, y a mis patrocinadores Ucalsa y la Federación de Golf de Madrid, que me han ayudado a llegar aquí, también va una dedicatoria especial para Pedro”.