Con una vuelta casi impoluta en la que solo el bogey del 13 puso un pero a su tarjeta, Gonzalo Fernández Castaño descansa ya en la Casa Club tras completar la ronda inaugural del Portland Open en segunda posición.
Con una vuelta casi impoluta en la que solo el bogey del 13 puso un pero a su tarjeta, Gonzalo Fernández Castaño descansa ya en la Casa Club tras completar la ronda inaugural del Portland Open en segunda posición.
A Gonzalo le ha faltado rebajar su contabilidad en un golpe para asumir el liderato del torneo. Un golpe que se llevaría el bogey con el que acabó el día después de anotar cuatro birdies en los primeros nueve hoyos, y tres más en la segunda parte del recorrido.
Un torneo único de una época única del golf. Volvemos al Siglo XIX y principios del XX
Jugar al golf en grupo puede ser una modalidad efectiva de terapia grupal, especialmente para quienes se sienten in...
Los juveniles madrileños siguen puntuales con su calendario repleto de competiciones, demostrando una vez más su gr...