Fernández Castaño se encuentra con un torneo en el que se siente especialmente a gusto

Gonzalo Fernández Castaño llega al campo del Oceánico Victoria poco después de las diez de la mañana. Son las dos de la tarde y sigue en el campo de prácticas. En el mismo sitio. Dando una bola detrás de otra. Está acompañado por José Carlos Gutiérrez, uno de sus entrenadores. Andan corrigiendo alguna cosilla del swing y probando mil cosas de material, sobre todo varillas para el driver. El domingo acabó el Seve Trophy tras cuatro días de intensa competición, el lunes se metió entre pecho y espalda algo más de seis horas de carretera para llegar al Algarve directamente desde Madrid y hoy ha estado en el campo prácticamente diez horas. No está mal. Ya ven, detrás de un profesional de máximo nivel hay muchísimas horas de trabajo.

Fernández Castaño se encuentra con un torneo en el que se siente especialmente a gusto, aunque tardó en descubrirlo. “Los primeros años no vine porque se jugaba la semana después del Madrid Masters y yo acababa reventado. Ahora que lo conozco bien, me da pena habérmelo perdido al principio. Además, me gusta el campo y he tenido buenos resultados”, asegura. Ha jugado tres veces y quedó segundo en 2010, falló el corte en 2011 y fue decimosegundo el año pasado.

Tiene buenas sensaciones cuando pisa el Algarve y espera poder demostrarlo a partir del jueves. Este torneo es el puente hacia el frenético final de temporada que espera al madrileño, con las Series Finales del Circuito Europeo y el traslado a Estados Unidos a finales de año. Recordemos que el próximo curso será miembro del PGA Tour. “Claro que tengo algo de vértigo cuando pienso que me voy y dejo Madrid, es lógico tenerlo, pero espero que vaya bien y mi familia está también muy convencida, algo que es fundamental”, apunta.

El swing está en perfecto estado, tal y como se pudo comprobar en el Seve Trophy, donde formó una gran pareja con Nicolas Colsaerts y sacó una espléndido medio punto contra Jamie Donaldson. “Victoria después de trece años. ¿Suena bien, verdad? Estamos muy contentos”, afirma el madrileño.

Por cierto, el de Puerta de Hierro no se olvida de la cantera de la comunidad. “Me alegro mucho de que hayan podido volver a la primera división, es el lugar donde se merecen estar”, afirma uno de los principales referentes, precisamente, de toda esa cantera.