Alex del Rey, 'el flechas', puede presumir de ser campeón de Europa. Lo consiguió con España, en Austria, contra todo pronóstico y frente a una especie de 'dream team' como era Inglaterra. Es el sueño hecho realidad para cualquier joven golfista. Es el momento de desconectar, descansar y recargar baterías. Un buen momento para que nos cuente sus sensaciones. Nos sentamos a hablar con un campeón de Europa. Hay que ver lo bien que suena eso dicho en alto...

¿Cómo se siente un campeón de Europa?

Ayer sinceramente era todo alegría, aunque también estábamos todos un poco impactados por el momento. Íbamos con pocas expectativas y ganarlo fue impactante. Estábamos un poco en shock. Un día después de ganar, en frío, te das cuenta de lo que has hecho. No puedo describir con palabras lo que siento y lo contento que estoy porque esto al final lo haces por España, por el país, por la gente que hay detrás. Poder representar a España es increíble y encima ganar el oro... No tengo palabras para explicarlo.

España no estaba en las quinielas y, sin embargo, cayó el oro, ¿cuál fue la clave?

No estábamos en las quinielas, ni éramos favoritos, eso es cierto. Nosotros queríamos conseguir una medalla, pero para lograr el oro tienes que ganar todo, tienes que jugar muy bien al golf. Es un torneo donde necesitas sacar lo mejor de cada uno en ciertos momentos. El primer match lo ganamos en el 20, el segundo en el 19 y el tercero en el 18. Hay mucha igualdad. También nos podíamos haber ido a casa en el primero. Hemos dado la sorpresa por no ser favoritos y estamos encantados, muy felices. Hemos demostrado que no hace falta tener un equipo en el que todos sean grandes campeones, como era Inglaterra, sino seis jugadores que sabemos jugar al golf, jugamos bien, con muy buena actitud, motivación y ganas, muchas ganas de ganar esto. Eso es lo que ha sacado adelante que saquemos este oro.

¿Alguna anécdota que se te haya quedado grabada de la semana?

Hay muchas anécdotas y frases. Llevamos toda la semana con Txomin Hospital, que nos estaba contando historias de Seve, salíamos al campo con esas historias y cuando volvíamos le decíamos a Txomin los golpes que habíamos dado y comentábamos si esto lo ve Seve, alucina... De alguna manera, íbamos queriendo pegar golpes de Seve.

Y en cuanto a las frases, hay muchas, por ejemplo la de Manuel Elvira, cuando ganó en el hoyo 20 el primer match. Tenía un putt muy largo y desde el principio se puso a decirle a la bola qué buena vas, qué buena vas, y todos lo decíamos cada vez que teníamos un putt difícil. Después está el famoso “Y ahora qué” de Víctor Pastor. También estaba Adriá y sus bombas, el pegador del equipo, y a mí me llamaban 'el flechas' por los hierros a bandera que he pegado esta semana. De algún modo, todos teníamos en la cabeza los golpes de Seve. Llevamos tres semanas con Txomin y hemos oídos mil historias de Seve y seguro que llevar a Seve en la cabeza ayuda mucho.

¿Qué nota te pondrías por el campeonato a título individual?

Muy buena. Es verdad que no he ganado ningún partido decisivo, ni el último match, ni el definitivo, pero gané todos los individuales, bastante rápido y eso para el equipo, tener un punto rápido, da mucha vida. Me he gustado mucho esta semana, me pondría un nueve. La final del Europeo fue muy buena porque gané al campeón del British Amateur que llevaba no se cuánto sin perder. Fue un día muy duro, con mucho viento y marchaba tres menos en cuatro hoyos e iba empate... y eso es muy duro. Me pongo un nueve.

¿Qué puedes adelantarnos de tu futuro?

Voy muy a corto plazo y lo próximo es descansar un poco. Tengo una semana de vacaciones y la voy a aprovechar muy bien. Ha sido una semana muy dura, con muchas emociones, mucha presión siguiendo a los compañeros, más tenso que ellos porque no puedes hacer nada... Estoy cansado y necesito desconectar un poco. En dos semanas empieza una competición con Madrid que tenemos muchas ganas de ganar y pienso darlo todo.