El próximo domingo 19 de noviembre se va a celebrar el Torneo de Ganadores de P&P en la Escuela de golf de la Federación de Madrid y las inscripciones irán íntegramente a Juegaterapia para la construcción de 3 hoyos de putting green del hospital Gregorio Marañón.

La FGM y su Comité de P&P se unen a la causa de los niños enfermos de cáncer con Juegaterapia donde “La quimio jugando se pasa volando” donando la recaudación de las inscripciones de torneos para la construcción de 3 hoyos de putting green en la azotea del Gregorio Marañón para que los niños de la planta de Oncología puedan pasar el tratamiento más contentos y entretenidos jugando al golf..

El próximo domingo 19 de noviembre se va a celebrar el Torneo de Ganadores de P&P y las inscripciones irán íntegramente a Juegaterapia para la construcción de 3 hoyos de putting green del hospital Gregorio Marañón.
Disputarán la prueba los 1 y 2 de cada ranking (Senior masculino y femenino, Caballeros 1ª y 2ª categoría, Damas 1ª y 2ª categoría, Iniciación masculino y femenino) y los primeros y segundos clasificados de los campeonatos de Madrid de P&P.

La Fundación Juegaterapia ayuda a los niños enfermos de cáncer a través del juego. Recoge videoconsolas que la gente ya no usa y las reparte por las habitaciones de oncología pediátrica de los hospitales españoles para que los pequeños jueguen y se olviden de su enfermedad. En España ya ha entregado consolas en 84 hospitales y también en Portugal, Marruecos, El Salvador, Afganistán, India, Guinea y Guatemala.

El Jardín de mi Hospi es una iniciativa de Juegaterapia, pionera en España, que consiste en recuperar las azoteas en desuso de los hospitales y convertirlas en jardines para que todos los niños ingresados puedan jugar al aire libre. Ya ha construido dos: el primero, en el Hospital La Paz de Madrid y el segundo en la azotea de la octava planta del Hospital 12 de Octubre, también en Madrid. El tercero ya está en construcción en el Hospital La Fe de Valencia y se inaugurará en unos meses y el cuarto en el Gregorio Marañón.

El golf es extraordinario