“Este torneo es el que realmente marca la temporada, pues si te clasificas para el torneo final es un buen año, pero si no lo logras es un desastre, y por eso estamos contentos de haberlo conseguido. Ahora a por objetivos más ambiciosos,” nos comentaba el propio Álex horas después de ser el baluarte de su equipo tras una vuelta final de 65 golpes.

Precisamente, ese 65 tiene una historia muy curiosa, ya que únicamente 24 horas antes y en el mismo campo, el madrileño hacía una vuelta de 75 golpes, que de haberse repetido hubiera puesto casi imposible la clasificación de su equipo. “Es curioso porque si digo la verdad, no sé de dónde ha salido el 65 de hoy, porque no he pegado nada bien a la bola y lo normal hubiera sido otro 75, pero cierto es que he enchufado putts desde todos lados… Ha sido algo muy especial.”

Ahora llega el momento más especial del año para Alejandro y su universidad, pues la próxima semana comienza el NCAA Championship, torneo por el que pelean todo el año y al que sólo acceden los 30 mejores equipos de todo Estados Unidos. Son tres días en formato medal-play, a partir de ahí se hace un corte con los 15 mejores y finalmente otro corte de ocho equipos que se juegan el campeonato a match-play. Es justo esa ronda, la de los ocho mejores, el objetivo de Del Rey:
“Llegar a las rondas de match-play es el objetivo ambicioso del año, ya que es tremendamente complicado. Para hacernos una idea, alguien como Jon Rahm nunca ha jugado esa ronda en este torneo, y mira lo importante que ha sido para esta universidad. Ojalá podamos lograrlo.”

En cuanto al objetivo individual, está claro que en Arizona State están contentos con Álex, pero el madrileño no se conforma y tiene los ojos puestos en una gran meta: la placa que te acredita entre los mejores del país. “Hay varios tipos de placas, pero las mejores y las que yo quiero lograr son dos; una por quedar entre los 15 mejores del NCAA Championship, y la otra por terminar entre los 50 mejores del país durante la temporada. Ahora mismo estoy en el puesto 80, por lo que necesito un gran torneo, y vamos a luchar por ello. Jugadores como Rahm o Cañizares lograron con mi universidad una placa cada año, yo también quiero.”

Otra muestra más de la garra y la ambición de Alejandro Del Rey, ojalá que dentro de unos días podamos volver a contar que sigue conquistando América.